“Muchos de los miedos que tienen los niños los creamos los padres”

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“Curro tienen una discapacidad, aunque yo no se la veo. Solo tiene un cromosoma más”, explica Sonia con su sonrisa siempre puesta, al tiempo que recuerda como “durante el embarazo me hicieron una prueba que dio un falso negativo, por lo que no sabíamos que venía con síndrome de Down”.

Hace unos días, el pequeño ha comenzado el colegio, no ha necesitado ningún tipo de adaptación especial y su madre ha vivido el inicio de esta nueva etapacon total “tranquilidad”. Y es que el hecho de que desde los quince días esté recibiendo los apoyos necesarios para su desarrollo, lo hace todo un poco más fácil.

“Muchos de los miedos que tienen los niños los creamos los padres”, por ello en casa, donde Curro es la “piedra angular”, han tratado siempre de transmitirle calma, positividad y la filosofía de que “con trabajo todo se puede”.

Sonia reconoce que también tiene sus propios miedos. “Pienso en el futuro, confío en los adelantos y en que la sociedad cada vez está más preparada”, pero “me imagino que habrá gente que lo rechace”. Sin embargo, afirma de manera rotunda que “en su entorno no pasará”.

Además, del recién estrenado cole, donde “se lo pasa pipa”, Curro pasa las tardes entre la piscina, las terapias ecuestres y los apoyos de Asprodisis. Una apretada agenda que lleva “estupendamente”, ya que uno de los objetivos es “estimularlo todo lo posible”, como recomiendan desde Atención Temprana en Asprodisis.

Recomendaciones del equipo CAIT

Desde el CAITde Asprodisis se hace un intenso trabajo para que el inicio o la vuelta al cole de los niños que tienen discapacidad o necesidades especiales se viva como una experiencia positiva para las familias.

La psicóloga y coordinadora del CAIT en Asprodisis, Irene Miguel, explica que, tras un periodo largo de vacaciones, hay que “anticipar a los niños lo que va a suceder y enfocarlo como un proceso positivo y un reencuentro con amigos donde van a disfrutar”.

En el caso de niños con necesidades especiales también es importante “hacer una historia social donde se pueda prever aquello que le pueda generar inseguridad o angustia y que después vaya a derivar en problemas de conducta”, señala.

Por otra parte, la psicóloga explica que muchos padres conocen que sus hijos tienen necesidades especiales al comenzar el colegio. “A pesar de que hacemos visitas a las guarderías y damos el toque de atención, suele pasar que hasta que el niño no comienza el colegio parece que no ven ese desfase”. En este sentido, apunta que el “todavía es muy pequeño” es una frase muy recurrente.

Para abordar esta situación “desde Atención Temprana se llevan a cabo dos reuniones en el año con los orientadores de los centros educativos”. Además, “estamos a disposición de los profesores para ayudarles en lo que sea posible”.

Por otro lado, con los niños que tienen alguna discapacidad física también se hace un destacado trabajo durante el curso. Según explica Fran Gallego, fisioterapeuta de Atención Temprana, “podemos reunirnos con los orientadores para que aquellos niños que tengan algún problema físico puedan tener las adaptaciones necesarias como las sillas o las mesas si necesitan algún tipo de apoyo”.

Además, en el caso de los niños que están en Atención Temprana, “cuenta con unos informes de los niños que permiten que los centros educativos sepan sin tienen algún tipo de dificultad o necesitan adaptación”.

A nivel general, Gallego recuerda la importancia de la higiene postural y que las mochilas de los niños no superen el 10% de su peso. 7 de cada 10 niños pueden tener problemas de espalda, advierte. Por ello recomienda, llevar una vida activa y practicar deporte va a evitar lesiones futuras.